De el servicio técnico de HP, un teléfono que no funciona y la posibilidad de dejar que otros se ocupen de tus tareas o cuento tonto.

Érase una vez un chico al que le gustaba una chica y una chica que desconocía la existencia de un chico que se sentía atraido por ella. Ella escribía todos los dias rigurosamente en un blog de dudosa calidad, con gran cantidad de faltas de ortografía y él entraba todos los dias a leer lo que ella había escrito. Este chico cada día estaba más y más convencido de que esa chica era el amor de su vida, la mujer de sus sueños. Y todo esto sin haberla visto. Pero claro, la carne es la carne y ese chico le gustaban las típicas chicas guapas, y presuponía que esa chica sería la mujer más preciosa del mundo, ya que siempre contaba que había uno o otro chico que le había tirado los trastos y cosas así, pero ella pasaba de todos, buscando el amor verdadero. Y, efectívamente, la carne es debil y ella anunció que había conocido a un chico maravilloso, que le gustaba mucho. Él se sintió fatal, no se esperaba eso, pero había sucedido. Ella finalizaba su post diciendo que realmente no lo había conocido, que había llegado a un blog donde escribía un chico que le parecía maravilloso, y puso el enlace. Ese enlace era el blog que ese chico escribía. Se puso muy nervioso y escribió rápidamente un post de respuesta al de ella diciendo todo lo que sentía. Ese chico fué el hazmerreir de todos sus conocidos a partir de entonces y no, no consiguió a la chica, ya que el blog que rigurósamente visitaba todos los días era el blog de su abuela, mujer que sin grandes estudios se había apuntado a un curso de internet para la tercera edad y una de las lecciones era conocimiento y escritura de un blog en los que la mujer escribía como desearía que fuera su vida si fuera joven de nuevo.

Y basta de cuentos tontos. Sabed que ha salido un disco tributo al Chinese Democracy. Estos yankis están chalados.