martes, junio 18, 2013

La muerte de la creatividad

Ayer cogí, sin que sirva de precedente (aunque fue toda una experiencia, patética, pero experiencia) libreta y papel, y ya que me esperaba un trayecto en metro de 45 minutos y no tenía el kindle, decidí intentar escribir algo.

Empecé intentando utilizar los cuadritos para hacer personajes de 8x8 píxeles, uno salió medio bien. Después intenté dibujar formas geométricas y un par de logos de los que hay por el metro, con tremendo fracaso. Posteriormente intenté pensar cómo haría un wargame de cartas que pensé un día que estaría chulo. Fracaso total, no se me ocurría nada. Tras eso intenté escribir algo. Lo primero que logré escribir es:

¿Donde se ha ido mi creatividad?

Cuando por fin se me ocurrió algo, escribí una breve historia de amor (o sexo implícito) interracial, apenas 10 o 12 lineas con mucho macarrismo y lujuria. Mi novia me dijo, cuando se la leí orgulloso, que era una chorrada.

Tras mi historia, y antes de que me dijera esta que era una chorrada, empecé a escribir un esbozo de l
   -Mi jefe me acaba de llamar para que agilice una petición, ahora sigo-
   -Petición acabada, 3 minutos en algo que originalmente costaba 15, no está mal la automatización-
   -Acaba de entrar otra petición muy tocahuevos...luego-

Por donde iba, tras acabar mi historia, y antes de que esta me dijera que era una chorrada, empecé a escribir un esbozo de lo que será mi gran saga de ficción prepostapocalíptica. Habrá muchos personajes, tramas, subtramas, situaciones, atentados, naves en órbita (pero poco más, transcurrirá apenas a 20 años en el futuro), etc...

La movida es que no se me ocurre por donde empezar, y apenas se unir palabras a estas alturas de mi triste vida.

No hay comentarios: